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sábado, 16 de julio de 2016

La ética en los organismos de salud y los medios de comunicación parte II:

         Como se ha dicho, otra causa de las enfermedades crónicas no transmisibles es la publicidad excesiva, y usted se preguntará ¿Cómo un anuncio publicitario va a crear en mi alguna enfermedad? La razón de nombrar la publicidad como causante de enfermedades se deriva del impacto psicológico que estos espacios publicitarios ocasionan en el público.  Muchas compañías invierten cantidades enormes de dinero para que su producto sea promocionado por diversos medios, un ejemplo de ello es Mc Donald’s, Coca-cola, Pepsi, Burger King, Wendys, KFC; estos medios  solo procuran enriquecerse económicamente y exponen continuamente estos anuncios sin tener presente que de algún u otro modo puede afectar al público.

       Un niño al observar la televisión y ver que cada cierto tiempo se promociona un producto siente deseo de tenerlo, de sentir ese producto en sus manos y es que los medios de comunicación crean mensajes para atraer más ese producto,  no solo sucede en niños también puede pasar en adolescente y adultos.

            Los productos con demasiada propaganda y publicidad no solo se convierte en un deseo, para muchos se convierte hasta en una necesidad o vicio, como se pudo observar en el video de “Super engordame”. Donde un hombre (Don Gorske), a lo largo de su vida ha consumido aproximadamente 26.000 Big Mac (hamburguesas de Mc Donald’s), él comenta que el 90% de su dieta alimenticia solida está constituida por el consumo de dicha hamburguesa.

       La Coca-cola, gaseosa reconocida mundialmente,  posee entre sus ingredientes un tipo de azúcar, el cual es capaz de activar unos centros nerviosos en el cerebro, aumentando el nivel de dopamina y serotonina, a través de la vía mesolímbica dopaminérgica, responsable de la adicción o craving. Nos satisface beber estos productos azucarados, ya que hacerlo nos produce una cierta sensación de placer. Cuanto más consumamos, más estimulamos nuestro cerebro. La activación del sistema de recompensa por los azúcares es de sobra conocida, ¿pero funcionan igual los edulcorantes industriales? La respuesta la encontramos en un artículo en The Yale Journal of Biology and Medicine, que apunta que sustancias como el aspartamo, considerado como seguro por la EFSA, pueden activar sólo parcialmente el sistema de recompensa cerebral. ¿La consecuencia? Consumir Coca-Cola Zero (o bebidas similares) podría incrementar nuestro apetito y necesidad de tomar más azúcar, lo que a largo plazo puede provocar un aumento de peso inesperado.


       En conclusión, se deben crear políticas para el control de diversas publicidades en diferentes medios de comunicación. En Venezuela, existe la muy conocida ley RESORTE (Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión), en sus artículos promueve el control de muchos productos que afectan la salud del público (cigarrillos, bebidas alcohólicas, juegos de azar, armas, entre otros). Sin embargo, es también necesario crear límites de tiempo en la publicidad que los medios de comunicación transmiten, además estos medios deberían tomar y crear consciencia para la mejora de la calidad de vida en los ciudadanos, realizar programas de información sobre las causas y efectos de las enfermedades crónicas no transmisibles.

La ética en los organismos de salud y los medios de comunicación

       La OMS (Organización Mundial de la Salud), declara que:

“Los diferentes organismos OGM (organismos genéticamente modificados) incluyen genes diferentes insertados en formas diferentes. Esto significa que cada alimento GM (genéticamente modificado) y su inocuidad deben ser evaluados individualmente, y que no es posible hacer afirmaciones generales sobre la inocuidad de todos los alimentos GM. Los alimentos GM actualmente disponibles en el mercado internacional han pasado las evaluaciones de riesgo y no es probable que presenten riesgos para la salud humana. Además, no se han demostrado efectos sobre la salud humana como resultado del consumo de dichos alimentos por la población general en los países donde fueron aprobados. El uso continuo de evaluaciones de riesgo según los principios del Codex y, donde corresponda, incluyendo el monitoreo post-comercialización, debe formar la base para evaluar la inocuidad de los alimentos GM”

       Pero ¿Qué ocurrirá con la salud de los seres humanos en unas cuantas décadas?, a pesar de que la OMS habla sobre la inocuidad de productos evaluados individualmente ¿ y no es que la mayoría de los productos son tratados con glifosato?. Además, si no hay riesgo en estos alimentos ¿Por qué Monsanto es el  dueño absoluto de toda la comercialización de semillas y derivados? Cuando no hay nada que esconder, lo más lógico es que exista el libre mercado.

       Los transgénicos le prometieron al mundo acabar con el hambre y la desnutrición, ya van más de 30 años  desde la producción de la primera planta transgénica. Sin embargo, esta promesa no ha sido cumplida solo fue un movimiento revolucionario de gobiernos y empresas para lograr alcanzar mayor poder adquisitivo. Muchos gobiernos y empresas convencieron al sector agricultor en trabajar con estas semillas y plantas transgénicas, en muchos casos ha repercutido en el medio ambiente con la destrucción de los suelos o el acondicionamiento de estos para uso exclusivo de estas semillas (GM).

       Actualmente la Tierra produce comida suficiente para alimentar a toda la población mundial. El problema del hambre se debe al mal reparto de los recursos y se puede resolver con decisiones políticas. En las condiciones actuales de organización de los mercados un aumento de la producción no serviría para abastecer a los más necesitados sino para aumentar la concentración de la riqueza.


       En conclusión, para acabar con el hambre y la desnutrición, mejorando la calidad de vida del individuo y de esta manera evitar enfermedades crónicas no transmisibles, la solución está en mejorar las técnicas de agricultura y ganadería sustentables. No debemos creer que la biotecnología ayudara al ser humano a mejorar su calidad de vida ya que estas empresas solo buscan mejorar y alcanzar un mayor poder comercial.  
                              

domingo, 10 de julio de 2016

Spartame

    Por otro lado, está la falta o poca información  que tienen las personas acerca de temas sobre salud, enfermedades crónicas no transmisibles, tratamientos, prevención, alimentación y productos no actos para el consumo, un ejemplo de ello es el aspartame, un edulcorante no calórico descubierto en 1965 por la multinacional farmacéutica G.D. Searle and Company.  James M. Schlatter, estaba trabajando sobre una droga contra las úlceras, y derramó por accidente algo de aspartamo sobre su mano. Cuando se lamió el dedo, se dio cuenta de que tenía un sabor dulce. El aspartamo ha sido declarado seguro para consumo humano por las agencias de más de noventa países y la FDA lo describe como uno de los aditivos más estudiados de la historia y afirma que su seguridad está más que confirmada. Sin embargo, algunos estudios han referido que el consumo masivo de aspartamo aumenta en ratones la sensibilidad a drogas que inducen epilepsia, por esta razón, en junio de 2011, el Instituto Ramazzini emitió un comunicado en su web en el que se informa que, debido a los resultados obtenidos en sus investigaciones, algunos científicos del Instituto fueron recibidos por varios parlamentarios europeos. A raíz de esto, los parlamentarios han conseguido que la Comisión Europea haya solicitado a la EFSA que comience un nuevo proceso de revaluación de este compuesto en 2012.

Mc Donald's

   En el mismo orden de ideas, tenemos la excesiva publicidad de “comida chatarra”, para nadie es secreto que las franquicias de comida rápida invierten cantidades exorbitantes de dinero para que su producto sea transmitido segundo a segundo por cualquier medio audiovisual. Henry Ford (1863 – 1947) fundador de la compañía de automóviles Ford tuvo este pensamiento “Quien deja de hacer publicidad para ahorrar dinero, es como si parara el reloj para ahorrar el tiempo”, es necesario que las compañías inviertan en publicidad, el problema está cuando lo hacen de manera excesiva y de forma subliminal. Un caso de excesiva publicidad es Mc Donald quien invierte 957 millones de dólares al año  en promocionar sus productos.

Introducción

      Para hablar de los diversos problemas que afectan la salud del ser humano debemos tomar en cuenta muchas causas, entre las 3 principales podríamos mencionar la modificación de alimentos (alimentos transgénicos), la publicidad excesiva de distintas empresas de comida rápida y la falta de información en las personas sobre temas de salud.

    Los medios de comunicación son la principal vía de información para crear conciencia y de esta forma prevenir los efectos que tienen estas tres causas. Para explicarlo de una mejor manera, mostraremos el árbol del problema para las enfermedades crónicas no transmisibles del ser humano:


          Como se puede observar, todo efecto viene dado por una o diversas causas, en este dibujo muestra como causas de las enfermedades crónicas no transmisibles como los alimentos modificados genéticamente; la empresa más conocida que altera y modifica los alimentos es Monsanto, a pesar de lograr avances en la biotecnología agroalimentaria ha generado muchos conflictos y controversias en el ámbito de salud y ambiente, debido a que altera drásticamente sus productos, un ejemplo muy conocido es la producción de la hormona sintética somatotropina bovina (o rBGH recombinante). Existen estudios científicos que prueban que la hormona provoca cambios significativos en la biología de las vacas (mastitis, esterilidad, y un aumento de la hormona del crecimiento y de otras hormonas en la leche producida) y también existen estudios que tratan de probar lo contrario, que la hormona es inocua. Debido a esta divergencia de opiniones, la leche de vacas tratadas con rGHB está permitida para su comercialización en Estados Unidos, México, Brasil, Corea, Argentina, Colombia, Egipto, Costa Rica, Emiratos Árabes Unidos, Israel, Honduras, Kenia, Jamaica, Perú, Namibia, Eslovaquia, Turquía, Sudáfrica y Zimbabwe, pero está prohibida en Canadá y la Unión Europea, quienes afirman que la hormona puede causar daños no sólo por los problemas ya citados, sino por la dosis extra de antibióticos que contiene la leche de las vacas tratadas con esta hormona suministrados para el tratamiento de las mastitis (infección de las mamas).